Existió Julio César?

        Existe USTED?

 

Sources:
Arthur Ferrill, The Fall of the Roman Empire (Thames & Hudson, 1986)
Edward Gibbon, The Decline & Fall of the Roman Empire (1799)
Michael Grant, Jesus (Orion, 1999)
Chris Scarre, Chronicle of the Roman Emperors (Thames & Hudson, 1995)
Pierre Grimal, Rome of the Caesars (Phaidon, 1956)
A. N. Wilson, Jesus (Harper Collins, 1993)
Elmar Gruber, Holger Kersten, The Original Jesus (Element, 1995)
Stewart Perowne, Death of the Roman Republic (Hodder & Stoughton, 1969)
Suetonius, The Twelve Caesars (Penguin, 1980)

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Kenneth Humphreys
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07.05.07 

Divus Iulius

Un Jesucristo Real

Julio César, ser humano del 200-44 BC, dios en adelante.

100 años antes del supuesto nacimiento de Jesús, vino al mundo otro dios-hombre, Gaius Julius Caesar. Asesinado en la cumbre de su poder, César fue elevado a la categoría de dios luego de su muerte.
.

 

 

 

 

 

 

El Seminario de Jesús

El increíble Mesías que desaparece.

Reunido por vez primera en marzo de 1985, el Seminario de Jesús ha reunido a docenas de eruditos universitarios y especialistas en evangelios, en representación de todas las diferentes tendencias del pensamiento cristiano, además de unos cuantos judíos y ateos.

En su estudio inicial, los eruditos recogieron más de 1500 versiones sobre aproximadamente 500 parábolas, aforismos, diálogos y relatos escritos durante 300 años de cristianismo.

Luego de 6 años de debate y reflexión, el consenso fue que el 82% de las palabras atribuidas a Jesús eran falsificadas.

En fase dos, entre 1991 y 1966, el Seminario de Jesús consideró 387 versiones de 176 ‘Eventos de Jesús’. Su conclusión: 84% de las actividades atribuidas a Jesús eran falsas.

 

 

 

 

En contraste, César, sus palabras y hechos están plenamente documentados por múltiples testigos.

 

 

 

 

 

 

Cartas Existentes

De César a Balbus; a Oppius; a Cicerón.

De Cicerón a César; a Basilio,, a Ático: a Matus; a miembros de la familia misma de Cicerón.

De Salustio a César.

 

 

 

 

 

 

 

Julio 13, 100 BC. Nace César en Roma de la esposa de un pretor, uno de los principales seis funcionarios judiciales.

87 A la edad de 13 años César se convierte en sacerdote de Júpiter (flamens dialis). Su padre muere dos años más tarde.

84 César desposa a Cornelia, hija de Cornelius Cinna, anterior cónsul y aliado de Gayo Mario, dirigente de los  populares (el partido del pueblo). Cornelia fue la madre de su única hija legítima, Julia.

81 Arrestado a los 19 bajo sospecha por el dictador Lucio Sulla, líder de los optimates (partido senatorial), César huye de Roma y se une al ejército.

 

80 – 78 César es oficial de estado mayor en Asia. Las habladurías sugieren una relación homosexual con Nicomedes, rey de Bitinia.

75 César es capturado por piratas sicilianos y retenido durante 38 días. Luego de que lo sueltan, regresa armado y acompañado y los crucifica.

73 Elegido pontifex, sacerdote de estado superior.

69 Muere su esposa Cornelia.

67 César desposa a Pompeya, nieta del dictador Sulla.

65 Elegido Aedile, uno de cuatro supervisores de templos, mercados, festivales y juegos.


63 A sus 37 años, César paga por llegar a ser nombrado Pontifex Maximus (sacerdote principal) y obtiene una residencia oficial en Roma.

Julio César como Pontífice Máximo grabado en denario del año 63BC. Viste la capucha sacerdotal.

62 César se divorcia de Pompeya en un escándalo respecto de la violación de los ritos secretos de Bona Dea.

61 César es nombrado gobernador de Nueva España con el rango de pretor. En España descubre que la guerra puede ser política y financieramente muy productiva.

 

Héroe Conquistador

César como Imperator (general) y pater patrie (padre de la patria).
 

60 César se une a Pompeyo y Craso en el primer triunvirato e instituye reformas en impuestos y tierras. Su hija Julia se casa con Pompeyo.

59 César se convierte en Cónsul. Se casa con Calpurnia, de la poderosa familia Piso. Obtiene luego la gobernación de Galia Cisalpina y Transalpina,  el Illyricum, y el comando de 4 legiones.

58-51 César combate en Galia, y vence a Vercingetorix. Cruza el Rin y derrota a las tribus germanas.

Aún sobrevive el relato propio de César sobre esta guerra, el De Bello Gallico.

 

55 – 54 César invade Inglaterra.

54 Julia, hija de César, y esposa de Pompeyo, fallece, rompiendo la alianza personal entre ellos.

Craso es muerto en el frente persa, acabando con el triunvirato.

52 Clodio, con la ex - esposa de César, Pompeya 10 años atrás, es asesinado.

50 La mayoría del senado dirigida por Cato y los “Optimates”, acusan a César de traición.

49 César cruza el Rubicón, provocando guerra civil entre él y Pompeyo.
 

Aún sobrevive el relato propio de César sobre esta guerra, el De Bello Gallico.

 

48 Pompeyo es derrotado en Pharsalus y asesinado en Egipto. César se relaciona con Cleopatra y pacifica el Ponto (“Veni, vidi, vinci”). De regreso a Roma, su dictadura es establecida, pero perdona a todos sus enemigos.

45 Derrota final de los hijos de Pompeyo en África y España. César es  declarado dictador vitalicio y comienza sus reformas.

44 Idus de Marzo. César es asesinado. Antonio pronuncia su elogio fúnebre en el funeral.

“ De qué sirvió, Oh César, tu humana existencia, de qué tu inviolabilidad, para qué las leyes? No, aunque dictaste muchas leyes para que los hombres no sean muertos por sus enemigos personales, sin embargo, con qué despiadada saña fuiste tú mismo asesinado por tus amigos!”

Antonio en duelo

 

Julio del 44. Durante los ceremoniales del  funeral de César un gran cometa aparece durante 7 días – un claro signo del ascenso de César a los cielos.

Antonio comparte un denario con el César muerto

 

Enero del 42.  El senado nombra a César “Divus Julius” (Divino Julio), oficialmente confirmándolo como un dios del pueblo romano.

42- 29. Octavio, hijo adoptivo de César (también llamado Augusto) venga la muerte de César y asesina a su hijo con Cleopatra, Tolomeo Cesarión.

 

La vida de César, hombre de estado romano, puede tal vez haber inspirado aspectos del mito cristiano.

 


Una escuela  historia de pensamiento una considera que versión la leyenda de Jesús fue un “chanchullo oficial” para pacificar a los judíos.

  


O es la de Jesús nueva del destino César?

* Tenga cuidado – Si insiste lo suficiente, podrá hallar 12 aspectos comunes entre los dos personajes. César calzaba sandalias, Jesús también calzaba sandalias…

 

 

 


Las evidencias que confirman la Existencia de César son legión!

- En contraste total con la completa ausencia de las mismas en el caso de Jesús!

A diferencia del mítico Jesucristo, sabemos cómo era Julio César físicamente, contamos con una completa historia de su vida. Sucesivamente fue general, orador, historiador, hombre de estado y legislador. Conocemos palabras escritas por él personalmente, así como otras escritas tanto por sus amigos, como por sus enemigos. Existen objetos que confirman su vida y muerte, así como los de sus sucesores. César estableció un estilo de gobierno – y un calendario – que le supervivió durante siglos.

 

 
Un retrato poco favorecedor de César, hallado cerca de Tusculum, labrado durante su vida. Sus retratos le muestran invariablemente luciendo una corona de laurel – para disimular su calvicie.  

Julio César representado en denario de Feb/Marzo de 44 BC.              

César es proclamado ‘dictador perpetuo’ a los 55 años.

En el reverso del denario, se muestran diversos símbolos que representan aspectos del poder de César y de su programa político.

 

La Fantasía se topa con la Realidad

….más evidencia sobre la existencia de Jesús que sobre cualquiera otra…”

Acordémonos:  Jesu Cristo el  Legendario llevó a cabo varias cosas extraordinarias. Su ‘ministerio’ fue un asunto bastante público. Muchos de sus trucos no tenían un especial valor (maldecir una higuera?) ; algunos podrían haber tenido desastrosas consecuencias para espectadores inocentes (recuerda la piara de 2000 cerdos suicidas  poseídos por demonios ¿  Con seguridad esto causó grave perjuicio a otras personas).

Pero ciertamente, con tales ‘milagros’ convenció a sus discípulos y a la multitud de que él era el Mesías, cierto?  Convirtiendo una jarra de agua en vino puede haber resultado trivial, pero resucitar uno de entre los muertos no es un truco  sencillo.

Pero si vamos a ‘creer’ que estos son relatos de hechos reales, cual es el criterio para su aceptación?  Sobre qué base debemos aceptarlos como  ‘hechos’ y no como fantasías?

 

Un completo record de todo lo que Jesús nunca dijo, de los lugares que nunca visitó, y de todos los milagros que nunca llevó a cabo.

 

“No Evidencia de No- Existencia” – Bienvenidos a la Región Crepuscular

En un Universo negativo, extrañamente distorsionado, los apologistas cristianos declaran “que no hay evidencia” de la no-existencia del hombre-dios, como si fuera completamente natural creer en las más fantásticas e ilógicas historias a menos que existiera evidencia en su contra. Si ésta postura tuviera viabilidad alguna, porqué limitarse solamente a creer en Jesús? Porqué no creer también en Zeus, los duendes, y el diente del Ratón Pérez?

Un recurso favorito de los Salvados  es bostezar, mascullar “ese viejo cuento de nuevo”  e impacientemente declarar que la versión de que Jesús nunca existió es una herejía racionalista del Siglo 19, hace tiempos desmentida por “sólida evidencia”.

El resonante argumento de que “hay más evidencia acerca  de la existencia de Jesús que de cualquier otra persona de su época”  es seguida de un  potpourri de antiguas fuentes, como si una lista suficientemente larga, pudiera ocultar el hecho de que NINGUNA DE LAS CITADAS FUENTES DATA DE LA ÉPOCA DEL DIOS-HOMBRE.

Antiguos escritores  no – cristianos, incluyendo aquellos preferencialmente  citados por fuentes cristianas  – Josefo, Suetonio, Plinio, y Tácito – se discuten aquí.

Pero esquivando la cortina de humo de que los primeros cristianos ciertamente existieron (y de que tenían un variado surtido de creencias!), es la evidencia de la existencia de muchos de los grandes más grandes héroes y villanos de la historia realmente tan tenue?

 

 

En sus Propias Palabras

César fue testigo presencial de muchos de los hechos que describe en sus comentarios. Escribió, no para la posteridad, sino para lograr un impacto inmediato sobre los protagonistas de Roma, cuando intrigaba para adelantar su propia carrera política.

El lapso de tiempo entre las guerras en que tomaba parte, y sus respectivos escritos, era de meses, o máximo de unos pocos años.

En contraste, el tiempo transcurrido entre la redacción de los evangelios y los supuestos eventos que describen, es como mínimo de 40 años para ‘Marco’  y de 60-70 años para los otros tres evangelios.

Y quien fue testigo de esa natividad fabulosa, 30 o más años antes del ‘gran final’ ?

Siendo muy generosos, ‘Lucas’ y ‘Mateo’ pusieron  por escrito testimonios de habladurías un siglo después de que los ángeles, pastores y hombres sabios desaparecieron.

La verdad no adornada es que los relatos de los evangelios fueron escritos por testigos solamente de sus propias habilidades creativas de ficción.

Por buenas razones, basadas en proximidad espacial y temporal solamente, los historiadores conceden más credibilidad a los comentarios de César que a los evangelios, no importa qué tan prolíficamente hayan sido reproducidos.

 

Testigos Contemporáneos de César       

 

Cicerón

Testigo presencial de Caesar

Marco Tulio Cicerón (106- 43 BC) fue casi exactamente contemporáneo de Julio César.

Durante la lucha con Pompeyo, Cicerón, gobernador de Cilicia, tomó el lado de Pompeyo, pero después fue perdonado por César.

En Marzo del 44 BC Cicerón fue testigo del asesinato de César, aunque no tomó parte en la conspiración.

Luego del asesinato, Cicerón pronunció una serie de discursos llamados las “Filípicas”, pidiéndole al Senado apoyar a Octavio en contra de Marco Antonio. La “Segunda Filípica” fue un elogio de la conquista de las Galias por Julio César. 

Infortunadamente para Cicerón, Octavio llegó a un acercamiento temporal con Marco Antonio, quien entonces ordenó el asesinato de Cicerón.

Entre las 900 cartas existentes de Cicerón y a él dirigidas, se cuenta correspondencia tanto con César, como acerca del mismo.
“…Si  César pierde su cabeza de todos modos, Pompeyo siente solo profundo desprecio por él, confiando en sí mismo y en las tropas estatales…”
Cicerón a Ático, 7.8, 50 BC

 

 

 

Salustio

Cayo Salustio (86 – 34 BC) tribuno, gobernador provincial y partidario de César. Su testimonio consta en un relato, “Bellum Catalinae”.

Cátulo

Gayo  Valerio Cátulo (c84 – 54BC): “Carmina”

Asinius Pollio

Gayo Asinio Pollio (76 BC – 4 AD) fue un aliado de César y fundador de la primera biblioteca en Roma. Constituyó fuente  utilizada por Plutarco.

Virgilio

Virgilio (70BC – 17 AD): “ La Eneida”

Ovidio

Ovidio Naso (43BC – 17AD): “Metamorfosis”

 

Testigos Casi Contemporáneos

 

Paterculus

Velleius Paterculus (c19 BC-32 AD): "Historiae Romanae".

Lucan

Lucan (Marcus Anneaus Lucanus, 39 – 65 AD) siguió el ejemplo de su abuelo, Séneca el Viejo – un joven contemporáneo de César – quien posteriormente escribió una historia de Roma.

Lucan escribió su propia Farsalia aproximadamente un siglo después de la guerra civil que relata, usando como fuente  el trabajo de Séneca como testigo presencial.

Plutarco

Plutarco de Chaeronea (45 – 120 AD) fue un moralista griego, historiador y biógrafo (y sacerdote en Delfos). Escribió sus Vidas Paralelas (comparando los estilos de vida romanos y griegos) durante los reinos de Trajano y Adriano. Describió en detalle la vida y asesinato de Julio César (así como las de Marcus  Brutus  y Marco Antonio).

Appian

(c.95-165 AD): Guerras Civiles

Suetonio

El más famoso biógrafo de César, Suetonio el Tranquilo, escribió  Vidas de los Doce Césares  durante el reino del emperador Adriano (117 – 138).

Suetonio estuvo a cargo de los archivos imperiales, y como tal, tuvo acceso a mucha de la mejor información posible.

 

 

Et tu Jesus?

No hay nada intrínsecamente improbable en un rabí radical del Siglo 1, llamado Jesús. Y cualquier figura que emergiera como sabio o adivino  en la antigua Palestina es improbable que dejara mucha evidencia de su existencia.

Pero aunque podríamos tomar en consideración, tal vez, unos cuantos epítetos de la reportada sabiduría de tal gurú, continuaría siendo en extremo dudoso que las expresiones atribuidas al mismo hubieran sido  realmente dichas  por él, cualesquiera sean las pretensiones se hagan hoy en día acerca de “transmisión oral”.

Así, por ejemplo, podemos aceptar el reporte de Josefo (nuestra única fuente) de que un tal Jesús ben Ananías causó disturbios en Jerusalén con su ininterrumpido, mantra cargado de malos presagios, ‘Congoja para la Ciudad’, pero sospechamos que Josefo usó una licencia poética cuando reportó diciendo respecto de Jesús: “Una voz de Oriente, una de Occidente, de los cuatro vientos, contra Jerusalén y su casa sagrada, una voz contra el desposado y las desposadas, una voz contra todas las gentes” (Josefo, Las Guerras, 6:3)

Teniendo en cuenta que las lenguas antiguas carecían de símbolos para comillas, y no distinguían entre una expresión literal en un discurso de alguien, y una paráfrasis exacta, Josefo bien podría haber usado una paráfrasis aproximada. Estaba presente en Jerusalén en ese entonces (62AD) y escribió su relato dentro de la siguiente década.

No solo fue Josefo testigo presencial de mucho del drama que relata, sino que tenía acceso a los archivos imperiales de Roma, y a los comentarios militares, los hupomnemata. Es posible también comparar a Josefo contra datos arqueológicos, y no obstante sus exageraciones, lo que él escribió es generalmente confirmado.

 

Un falso Testigo

Como sucede, tenemos una desmedida cantidad de prosa  sobre Jesús. Nada particularmente novedoso o único sale de su boca, aunque mucho es contradictorio o es oscuro. Nada procede de una fuente confiable.

El evangelio de Tomás (hallado en una traducción cóptica en Nag Hammadi y en fragmentos griegos del Oxyrhincus), por ejemplo presenta 114 refranes “secretos” de Jesús, muchos de los cuales son versiones arregladas de escrituras judías,  y otros se parecen a medias a los del Nuevo Testamento. Otros son simples absurdos:

Refrán 7: Jesús dijo: ‘Bendito  el león que devora a un hombre, porque se convierte en   hombre!”

Refrán 114: Simón Pedro les dijo: “Dejemos que María se vaya, porque las mujeres son indignas de vivir.” Jesús dijo, “ yo mismo la dirigiré para que se convierta en varón, de manera que pueda también convertirse en un espíritu viviente similar a los varones. Porque toda mujer que se convierta en varón, entrará en el reino celestial.”

Los cristianos corrientes, por supuesto, no están muy felices con el “Quinto Evangelio” y dudan de su “confiabilidad”. Los refranes  no están (aún) empotrados dentro de relatos para darles alguna semblanza de realidad histórica, y no se mencionan milagros. “ Enseñanzas falsas, inventadas por los gnósticos” se exclama.

Pero empaquetar  dichos de sabiduría popular, dentro de una serie de “incidentes” o “encuentros” – aún con un milagro como encime – no será aún un fraude manifiesto?  Se supone que Jesús hablaba en arameo, pero los evangelios fueron escritos en griego. La traducción literal de un idioma al otro inevitablemente falla en muchos puntos. No es sorprendente que los eruditos del Seminario de Jesús excluyan más del 80% de las palabras del hombre-dios como invenciones.

 

Quien lo dice?

Quien hubiera puesto atención a lo que dijera “Jesús de Nazaret”  antes de que se emergiera como un líder espiritual verdadero? Sin embargo Lucas (2.48.49) cita las palabras del dios-hombre de 12 años de edad en el “incidente del templo”.

OK, aceptemos que luego de que su hijo tuvo rotundo éxito, su madre María llegara  a convertirse en una orgullosa progenitora, llena de anécdotas acerca de su ilustre hijo…..  Ella podría incluso rememorar acerca del viaje a Belén, aún a Egipto.

Pero María no aparece por parte alguna. Mateo 3  relata un diálogo entre el hombre-dios y Juan el Bautista  ( sin contar alguna voz celestial) en  la Judea rural. Solo cuando el Bautista es tomado preso, JC selecciona sus discípulos, de modo que ellos tampoco habrían estado presentes. Entonces, donde más se puede originar  ésta historieta, excepto en la fértil mente de los escribidores de evangelios?

OK, aceptemos que  “desconocidos testigos, no especificados”, salen corriendo a regar el cuento… De hecho, tenemos que confiar en tal tipo de habladuría una vez y otra;  La charla nocturna de JC con Nicodemo, su conversación con una mujer samaritana, cuando sus discípulos salen de compras, etc, etc.

Pero aún no hemos salido a lo limpio. En varias oportunidades, los escribidores de evangelios inequívocamente reportan supuestas conversaciones de Jesús cuando ni ellos ni otros seres humanos están presentes.

Quien podría tener la más mínima noción acerca de lo que Jesús dijo cuando se encontraba solo? Por ejemplo, el capítulo 17 de Juan está dedicado enteramente a un monólogo dirigido por un Jesús solitario a Dios en persona.

Mateo (4.3.10) se refiere a Jesús en el desierto sosteniendo conversaciones con Satanás.

Cómo podría Mateo saber qué dijo? Debemos imaginarnos que Jesús r4ememoraba, “ Hola muchachos, una vez estuve en el desierto por  40 días y 40 noches, y adivinen quien apareció….?

Si tomamos éste camino, más vale que nos soñemos todo…

 

 

Escriba su propia Tradición sobre Jesús!

Los evangelios suministran detalladas escenas de “Jesús en Acción”  para aproximadamente su último año de vida, pero son ensordecedoramente mudos acerca de sus restantes 30 años. El 90% de la vida del hombre-dios está ausente.

No hay problema, siga una seña de la Santa Madre Iglesia, los escribidores creativos  de evangelios tienen un gran futuro rellenando los años faltantes.

Si le parece, Jesús podría viajar con José de Arimatea a Inglaterra, a aprender tradiciones druídicas en Glastonbury. De golpe él hasta construyó una cabaña con sus propias manos.

O si lo prefiere, nuestro héroe viaja a la India, por 17 años, tanto como estudiante como profesor de santones budistas e hinduistas. Afectuosamente le llamaban Issa.

Otras opciones pueden ser Tibet, Japón, y si usted es mormón, América.

Porqué no hacerle visitar su ciudad natal?

En épocas de folklore, un nombre que nunca existió puede hacer no solo cualquier cosa, sino estar en cualquier parte!

 

El Fraude las Edades

Beneficia a Alguien  mantener un mito?

Por supuesto, a una vasta industria global de la religión. Siempre ocurrió así? Pues claro que SI, incuestionablemente, desde que Constantino hizo del cristianismo la religión oficial del imperio, pero no menos en los siglos precedentes.  Evidentemente, sacerdotes, shamanes, brujos, han vivido a gorra de de los demás, desde que la gente comenzó a vivir en grupos. Tenida en cuenta ésta motivación venal, mercantil, de “los religiosamente inclinados”, debiéramos tener mucho cuidado antes de aceptar sus productos y reclamos.

Durante esos 2000 años alguna vez la iglesia fabricó leyendas y reliquias?

La vasta industria medieval de las falsificaciones consta en los archivos históricos – una causa que contribuyó a la Reforma. Antes de que el canon de libros sagrados fuera terminado en el Siglo 5, centenares de historias extravagantes existían. Los rencorosos concilios de la iglesia decidieron cuales eran “sagrados”, y cuales “píos romances”.

Los reclamos acerca de Jesús incluían la suspensión de las leyes físicas?

Absolutamente sí. No hablamos de un mero carpintero, sino de un hacedor de milagros. Apartando el miasma de la “Fe”,  necesitamos más evidencia acerca de un milagro, no menos.

Pero todas las supuestas pruebas acerca de Jesús resultan dudosas o inexistentes.  No incluyen pruebas contemporáneas de Jesús; ni hay evidencia de la existencia de Nazaret durante el Siglo 1;  maliciosamente alterados escritos de autores no-cristianos para intercalar falsas  ‘evidencias’; testimonios de los primeros cristianos, quienes para comenzar, no creían en un Jesús humano; evangelios que se contradicen escuetamente unos con otros; miríadas de casos de ‘Historias de Jesús’ copiadas de leyendas anteriores y de otras culturas; y así continúa indefinidamente.

Existe  tanto el motivo para la fabricación cristiana de un mito, y la evidencia de siglos de mítica creación. En otras palabras, lo que hallamos en “los comienzos” es la misma venalidad y charlatanismo que continuó, siglo tras siglo, cada vez más crueles y despiadados.
 

 

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